Desde Gruterval queremos informarte de las ventajas que ofrece la instalación de un suelo radiante frente a otros sistemas tradicionales de calefacción. Si estás construyendo tu nueva vivienda o vas a reformar, este es sin duda uno de los sistemas más recomendables de calefacción. Desde hace muchos años es la primera opción de calefacción en muchos países y en España se está promocionando gracias a sus múltiples beneficios.
El primero de ellos es la eficiencia energética. El suelo radiante es un sistema de calor eficiente y de bajo consumo, lo que lo convierte en la opción más económica frente a otros sistemas de calefacción tradicionales.
Al contrario que los radiadores, que suelen estar en un lateral de la habitación y facilitan que hayan unas zonas más frías que otras, otro de los beneficios a destacar de los suelos radiantes es que proporcionan una distribución uniforme del calor, ya que se realiza de forma homogénea.
El suelo radiante es un sistema de calor invisible, ya que no hay ningún elemento extra en paredes o techos. Evitamos así un impacto visual negativo y aprovechamiento de toda la estancia para muebles u otros elementos decorativos. Por tanto no afecta a la estética de la vivienda.
Si eres de los que le gusta andar descalzo por casa esta es tu mejor opción, la sensación que tienes al no sentir frío en los pies hace de tu vivienda un lugar de confort. El simple hecho de que el calor fluya desde abajo hacia arriba hace que no se sientan diferencias de temperatura en el cuerpo.
Es más saludable ya que debido a su funcionamiento a baja temperatura, no se generan corrientes de aire caliente que reseque el ambiente ni las mucosas nasales, por lo que evita también el movimiento de polvo y microorganismos. Esto supone una mejora considerable en la calidad del aire.
Además este sistema de calefacción es silencioso, no produce ni ruidos ni vibraciones, ayudando al descanso en el hogar.